Cómo hacer ravioles caseros de espinacas y queso de cabra
Eleva tu juego de pasta con estos lujosos Ravioles de Espinacas y Queso de Cabra. Los bolsillos de pasta tiernos están rellenos con una cremosa mezcla de queso de cabra ácido y espinacas ricas en nutrientes, y luego se sirven con una salsa ligera de mantequilla. Este impresionante plato es perfecto para una cena especial o cuando quieres mimarte con algo extraordinario.
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Detalles de la Receta
- Tiempo de preparación: 1 hora
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora 30 minutos
- Porciones: 4
- Dificultad: Intermedia
Resumen Simple
Disfruta del equilibrio perfecto entre el cremoso queso de cabra y las sabrosas espinacas envueltas en una delicada pasta casera. Estos Ravioles de Espinacas y Queso de Cabra son un plato gourmet que sorprendentemente es fácil de hacer en casa.
Detalles de la Receta
- Tiempo de preparación: 1 hora
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora 30 minutos
- Porciones: 4
- Dificultad: Intermedia
Ingredientes
- 2 tazas de harina de todo uso
- 3 huevos grandes
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 8 onzas de espinacas frescas, picadas toscamente
- 8 onzas de queso de cabra, ablandado
- 1/4 taza de queso Parmesano rallado
- 1/4 cucharadita de nuez moscada
- Sal y pimienta negra al gusto
- 4 cucharadas de mantequilla sin sal
- 2 dientes de ajo, picados
- 2 cucharadas de hojas de salvia fresca, picadas
- 1/4 taza de agua de cocción de la pasta (reservada)
- Ralladura de 1 limón
Instrucciones
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En un tazón grande, mezcla la harina y la sal. Crea un hueco en el centro y agrega 2 huevos y aceite de oliva. Mezcla con un tenedor, incorporando gradualmente la harina hasta que se forme una masa irregular.
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Amasa la masa sobre una superficie enharinada durante 8-10 minutos hasta que esté suave y elástica. Envuelve en plástico y deja reposar durante 30 minutos.
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Mientras tanto, saltea las espinacas en una sartén a fuego medio hasta que se marchiten, aproximadamente 3 minutos. Enfría y escurre el exceso de humedad.
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En un tazón, mezcla las espinacas frías, el queso de cabra, el Parmesano, la nuez moscada, la sal y la pimienta.
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Divide la masa de pasta en 4 porciones. Pasa cada porción por una máquina de hacer pasta, comenzando en el ajuste más ancho y disminuyendo gradualmente hasta llegar al segundo ajuste más fino.
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Coloca una lámina de pasta sobre una superficie enharinada. Coloca 1 cucharada de relleno cada 2 pulgadas a lo largo de la lámina. Pinta alrededor del relleno con agua.
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Cubre con otra lámina de pasta y presiona alrededor del relleno para sellar. Corta en ravioles con un cuchillo o una rueda de pasta.
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Lleva una olla grande de agua salada a ebullición. Cocina los ravioles en tandas durante 3-4 minutos hasta que floten a la superficie.
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Mientras se cuecen los ravioles, derrite la mantequilla en una sartén grande a fuego medio. Agrega el ajo y la salvia y cocina hasta que estén fragantes, aproximadamente 1 minuto.
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Usando una espumadera, transfiere los ravioles cocidos a la sartén. Agrega 1/4 taza de agua de cocción de la pasta y mezcla suavemente para cubrir.
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Sirve de inmediato, decorado con ralladura de limón y Parmesano adicional si lo deseas.
Notas del Chef
- Para un atajo, usa envolturas de wonton en lugar de hacer pasta desde cero.
- El relleno se puede hacer un día antes y refrigerar.
- Congela los ravioles sin cocinar en una bandeja para hornear y luego transfiere a una bolsa de congelador para un almacenamiento más prolongado.
- Para una versión más ligera, prueba usando ricota parcialmente desnatada en lugar de parte del queso de cabra.
- Agrega un puñado de piñones tostados a la salsa para obtener más crujiente y sabor.
Información Nutricional
Por porción: Aproximadamente 550 calorías, 28g de proteína, 30g de grasa (18g saturada), 50g de carbohidratos, 3g de fibra. Este plato es rico en calcio por el queso de cabra, hierro por las espinacas y proporciona un buen equilibrio de proteínas y carbohidratos complejos.
Sugerencias para Servir
Sirve estos ravioles como plato principal con una guarnición de tomates cherry asados o una ensalada ligera de rúcula aderezada con vinagreta de limón. Para una comida italiana completa, comienza con una pequeña ensalada Caprese y termina con una bola de sorbete de limón. Acompaña con un vino blanco seco como Pinot Grigio o un tinto ligero como Chianti. Para una presentación hermosa, espolvorea los ravioles servidos con más hojas de salvia fresca y un ligero toque de Parmesano rallado.